Criptomonedas y blockchain en noviembre de 2025: airdrops, regulaciones y proyectos reales

En noviembre de 2025, la blockchain, una tecnología de registro distribuido que permite transparencia sin intermediarios. También conocida como cadena de bloques, se convirtió en el eje de decisiones financieras reales, no solo en especulación. No fue un mes de rumores vacíos, sino de ajustes de cuentas: proyectos que prometían mucho y entregaban nada, regulaciones que empezaban a tener dientes, y usuarios que aprendieron a distinguir entre oportunidad y estafa.

El airdrop, una distribución gratuita de tokens para atraer usuarios a un proyecto. A menudo confundido con una ganancia segura fue el gran tema, pero no como muchos pensaban. Mientras algunos creían que BOT Planet o EVA Community eran oportunidades, la realidad fue que muchos de esos airdrops no existían. En cambio, los que sí tenían fundamento —como EQ Equilibrium X Republic o Rainmaker Games— demostraron que el valor no viene del anuncio, sino de la utilidad real. Y no solo eso: también aprendimos que los airdrops sin contrato renunciado, sin comunidad ni transparencia, terminan valiendo $0, como JF o REGENT COIN.

La regulación cripto, el marco legal que define cómo se pueden usar, comerciar y tributar las criptomonedas. Un tema que ya no es solo para abogados dejó de ser algo lejano. Canadá mostró cómo las leyes varían por provincia: Quebec limita la minería por consumo energético, mientras Ontario exige licencias claras. Turquía prohibió usar cripto como pago, pero permitió exchanges regulados. Y en el Reino Unido, el 87% de las empresas fallaron en su registro en la FCA por errores básicos. En Vietnam, un impuesto del 0,1% por transacción se acercaba, y nadie sabía si eso mataría el mercado o lo haría más serio.

Y entonces estaban los proyectos que sí funcionaban. No por hype, sino por necesidad. Node AI permitía alquilar GPU ociosas para entrenar IA, ahorrando hasta un 62% frente a AWS. QuickSwap v3 en Polygon ofrecía swaps en dos segundos por menos de un centavo. Certificados blockchain empezaban a reemplazar papeles en universidades y empresas. Incluso el vesting, ese mecanismo que libera tokens poco a poco, dejó de ser un término técnico para convertirse en una señal de confianza: si un proyecto tiene un calendario claro, no está tratando de vender todo en el primer día.

Lo que encontraste aquí no fue una lista de promesas. Fue una guía de lo que realmente pasó. Lo que valía la pena seguir, lo que debías evitar, y lo que empezaba a cambiar el juego. No hubo magia. Solo hechos, datos y lecciones aprendidas a base de errores. Si quieres saber qué proyectos aún tienen vida, qué regulaciones te afectan, y cómo no perder tu dinero en el próximo airdrop falso, lo que sigue es lo que realmente importa.